El estado del bienestar

El estado del bienestar o el estado social, pueden definirse como aquel ente que concede sanidad, educación y demás cuestiones sociales a cambio de una retribución al mes, que se descuenta del salario de cada trabajador. Esta retribución al estado varia progresivamente al alza o a la baja según se trate de un salario alto o bajo. ¿Pero dónde está la trampa aquí?
Se supone que nuestra contribución debería quedarse ahí, pero no, esta se extiende hacia lo que comúnmente conocido como`` las cosas de nuestro día a día´´. Desde que nos levantamos estamos contribuyendo sin apenas saberlo. La luz contribuye, el agua contribuye, hasta las galletas del desayuno contribuyen.
Absolutamente todo tiene una relación con el sistema de tributación español. ¿Parece abusivo no? Teniendo en cuenta que la sanidad pública está en muchos casos ``hasta los topes de gente´´, que la educación pública ha devaluado su nivel gigantescamente y que los demás beneficios del estado social son en gran parte beneficios que otras corrientes de pensamiento político contemplan pero que incluyen de una forma mucho más mesurada. Cabria decir entonces que vivimos en el estado del sin sentido.
Nos cuesta reconocer que lo que predica nuestro Constitución desde 1978 en su artículo 1.1, sobre que nos constituimos en un estado social y democrático de derecho, puede estar equivocado en cuanto a lo social.
Tomar como ejemplo a EEUU en la sanidad o la educación, puede que no sea lo más acertado. Sin embargo, ellos poseen unas bases sobre las que corregir y desarrollar su crecimiento.
Toda gran medida sino recibe el apoyo que merece, puede venir acompañada de una gran coste social.
Margaret Thatcher y Ronald Reagan, tuvieron muy claro cuál era el camino que debíamos seguir. Hayek en su obra Camino de servidumbre, puso de manifiesto numerosas realidades y equivocaciones en las que se hallaban muchos de los intelectuales más destacados de su época, que eran por desgracia, los que controlaban las políticas estatales a nivel mundial.
Este intelectual se arriesgó al desprecio de todos los que le rodeaban al escribir este libro, y él lo sabía. Sabía que sería repudiado, acosado y defenestrado por aquello que iba a publicar, pero tenía la plena convicción de que debía hacerlo.
Estuvo alrededor de 20 años, apartado de panorama económico internacional, desarrollando su actividad intelectual en la Universidad de Chicago, el único lugar dicho sea de paso, donde le admitían de profesor en todo el mundo.
Volviendo a los dos grandes políticos que mencioné, fueron ellos los que nos han salvado. Parece que hablamos de una película de Star Wars la amenaza fantasma, pero es que literalmente nos salvaron de la amenaza de que el comunismo siguiera extendiéndose.
Tax free y mercado libre, eran términos que por entonces sonaban a algo estrambótico, utópico y desacertado. Los ``lideres´´ de la época habían advertido al pueblo que estos conceptos eran el mal. No les decían porque, tan solo afirmaban que traería consigo menos trabajo y más desesperación, que sumados al que había por entonces formaba el coctel perfecto para llevar a cabo un sistema de control de mentes perfectamente organizado, como si de un libro de Aldous Huxley se tratase.
Sin embargo Ronald y Marga, predicaron por todo el mundo las bondades del liberalismo y fueron dejando su semilla allí por donde pasaban. Cuando en sus países se produjo el milagro económico del mercado libre, estos otros, asolados por la desesperación como estaban, adoptaron poco a poco esas medidas y crecieron como nunca antes se había visto.
Alguien había dado con el mecanismo para hacer de mundo un lugar mejor. Pasados los años, cuando estos políticos, una vez abandonaron el poder ejecutivo, hablaron sobre lo que hicieron. Nos dijeron que era la única salida que teníamos, sino estábamos abocados a la destrucción en medio de guerras originadas por la desesperación.
Reagan concluyo una entrevista, en la que hablaba sobre las medidas que llevo a cabo junto con Thatcher, con una frase que quedo grabada en mí mente:
Si no es ahora ¿Cuándo? Si no somos nosotros ¿Quién?
I.C.

HITLER ERA DE IZQUIERDAS

Sé en lo que están pensando. ¿Hitler de izquierdas? ¿Cómo es posible? ¡Éste no tiene ni idea de lo que habla! Pero si me dejan que les explique, intentaré demostrarles fiel y diligentemente el por qué de esta afirmación tan rotunda. Espero que el análisis de la figura de Hitler les lleve a reflexionar y, sobre todo, a conseguir que su tiempo invertido en la siguiente lectura sea del máximo provecho. No se arrepentirán. No nos entretengamos, las semejanzas de Hitler con el socialismo les esperan.

1º.El NSDAP (Partido Nacional Socialista Obrero Alemán), junto con el Partido Fascista italiano, llevó a cabo el proceso de socialización de las personas. Proyecto basado en la camaradería y en el deseo de acabar con la alienación humana y la soledad que, consideraban, generaba el capitalismo liberal. Por consiguiente, la imposición de una supuesta felicidad colectiva mediante la creación de comunidades y colectivos extrafamiliares era inevitable, tal y como desarrolló Karl Marx en su libro de El Capital, y que consideraba la característica principal de su pensamiento. En Alemania, las Jungvolk eran las gemelas de las Junge Pionere de la República Democrática Alemana de la URSS. Igual ocurría con las Juventudes Hitlerianas y la Juventud Libre de Alemania, en la RDA. Semejanzas similares encontraremos por un lado en las secciones deportivas de las SA y las SS, con la Sociedad para el Deporte y la Técnica soviéticas, y por otro lado en la Asociación Femenina Alemana y la Federación Femenina Democrática. También, el amor por la belleza del trabajo, expresado en canciones, discursos, gimnasios, excursiones, campamentos, fiestas, etc, son claro ejemplo de los parecidos entre la Alemania Nacionalsocialista y la URSS.

2º En política económica, Hjalmar Schacht (ministro de finanzas de Hitler), no llegó a socializar los medios de producción (razón que han usado los marxistas para dar por concluida el carácter capitalista de Hitler), pero no por ello dejó de situar a controladores estatales en cada fábrica para asegurarse de que todo empresario cumplía fielmente su deber para con la causa del gobierno. Asimismo, fijó por decreto-ley los precios y los salarios en 1932, y creó comisiones para vigilar el perfecto cumplimiento de las leyes dictadas por el Estado. Aplicó un proteccionismo arancelario autárquico (similar al Keynesiano), en el cual todo empresario necesitaba de la autorización gubernamental correspondiente para poder comerciar con empresas y productos extranjeros bajo pena de muerte. Los bonos fiscales, las letras Mefo, la construcción de sus 12.000 famosos kilómetros de carreteras y la creación de un volumen de empleo público inconmensurable, a costa de un gasto público que llevó al endeudamiento de la nación y a su ruina son sólo algunas de estas prácticas, tan corrientes en la actualidad de los programas socialistas.

3º.El militarismo, y la admiración desorbitada enfocada en los uniformes, la valentía, la guerra y la camaradería son elementos que se repiten tanto en la Alemania Nacionalsocialita como en la Unión Soviética, ya incluso con Lenin.

4º. Cada vez que oigo a alguien decir que la raza humana es un parásito que debería ser aniquilado porque está agotando los recursos y destruyendo la naturaleza y asesinando a los animales, pienso "¿Por qué nos extrañamos de que un personaje como Hitler hiciera lo que hizo?", si hoy día hay gente que piensa como él. Un detalle que se nos revela en todo su esplendor cuando analizamos las leyes publicadas durante el gobierno Nacionalsocialista (1933-1945), es que las dos leyes que han mostrado a lo largo de la historia, un contenido tan claramente ecologista ortodoxo, son las de 1933 y 1935, escritas personalmente por Hitler. Ya durante la preguerra gustaba de hacer excursiones al campo para entrar en contacto con la naturaleza romántica. No digo con esto que el ecologismo sea malo, ya que la conservación del medio ambiente es un reto actual evidente, pero no debemos olvidar que éso no implica el radicalismo de algunos grupos ecologistas, muy cercanos al socialismo, que pretenden la aniquilación de la raza humana, igual que Hitler hace 70 años.

5º. A diferencia de lo que se piensa, durante el gobierno Nacionalsocialista ya se empezaron a aplicar las políticas "progres", a pesar del KKK. La desintegración de los estamentos y de los privilegios nobiliarios (Hitler fue el primer político en introducir a personas de clase baja en su equipo directivo), la revolución moral y sexual (la nivelación jurídica de la mujer alcanzó su cénit durante la II Guerra Mundial). Éstos podrían ser de los pocos casos que cogieron de los liberales, y que los socialistas empezaron a aplicar después de la II Guerra Mundial con sus medidas progres.

6º. Sin embargo, los dos elementos más característicos del pensamiento de Hitler, que plasma en su libro Mein Kampf (Mi lucha), entre 1923 y 1925, y que aplicó de modo programático durante todo su mandato, tienen su origen en el marxismo. Éstos son:
-1º. La pretensión de explicar la historia universal bajo un sólo punto de partida, y buscar leyes que intenten convertir la historiografía en una ciencia exacta. En este caso da lo mismo si dices "Todo acontecer histórico universal sólo es una manifestación del instinto de conservación de las razas", como expresaba Hitler en su referido libro, o "La historia de todas las sociedades existentes hasta nuestros días es la historia de la lucha de clases", como afirma Karl Marx de forma tajante en la introducción del Manifiesto Comunista de 1848. Ambas afirmaciones expresan la visión belicista de la historia de la humanidad, cuando la guerra siempre ha sido, en realidad, un estado de emergencia, no una situación permanente, como pretenden explicar estos 2 hombres. Hitler aplicó esta política durante la II Guerra Mundial.
-2º. El antisemitismo, el racismo y el exterminio de los judíos. Independientemente del posible racismo de Marx y de su antisemitismo, a pesar de ser judío (La Cuestión Judía, de Karl Marx), lo que resulta curioso es que su pensamiento sirvió de base para la política racista de Hitler, y explicaré por qué. Desde la noche de los tiempos, todo economista (el 1º ya fue Hesíodo, poeta griego del siglo VIII a.C)defendió que los seres humanos, al margen de nuestra condición racial, sexual o social, poseían una estructura lógica y unos principios basados en el raciocinio humano, por mínimos que fueran (¡incluso los romanos encargaban tareas a sus esclavos confiando en su mínima capacidad racional, según ellos). Karl Marx, en el siglo XIX, rompió con toda esa idea. Para él, los principios de un ser humano varían según su condición social y su clase. Por consiguiente, la economía es una ciencia de burgueses capitalistas, y sólo cuando se haya conseguido la igualdad de clases, toda ideología desaparecerá, y se alcanzará la verdad. Los burgueses dejarán de ser capitalistas, y los obreros dejarán de ser socialistas. El problema de este pensamiento es que proporcionó la base prestigiosa y pseudocientífica a numerosos prejuicios sociales que hasta aquella época no la tenían. El más claro era el racismo. Con esa idea, se llegó a la conclusión de que los principios lógicos ya no son iguales en todo ser humano, sino que varían según las razas. La raza judía era capitalista, usurera y egoísta, y la aria era guerrera, noble y fiel. Por lo tanto, no es de extrañar que el cosmopolitismo que había reinado desde el siglo XVIII y XIX, en el que se empezaban a reconocer que los negros´, los alemanes, los judíos tenían parentescos y todos mostraban capacidades parecidas se perdiera por estos nuevos pensamientos. No obstante, ésto no impidió que los soviéticos aplicarán ciencias burguesas para construir sus armas, ni que los nacionalsocialistas usarán a científicos de razas inferiores para desarrollar las suyas propias.

7º. Ya como anécdota, conviene resaltar la parte del libro de Hitler en la que expresa su decisión de tener como bandera una cruz gamada sobre un fondo ROJO, para atraer a obreros del SPD (Partido Socialista Alemán) y del KPD (Partido Comunista Alemán), con el objetivo de conseguir afiliados que se asemejaban a su ideología. Ésta idea tuvo sus frutos, ya que a partir de 1933, numerosos miembros de los aludidos partidos desertaron para afiliarse en el NSDAP.

En conclusión, me gustaría que todo el que haya llegado a terminar el artículo, se familiarice con los libros y las citas de los políticos nacionalsocialistas, comunistas y socialistas durante el pacto germano-soviético (1939-1941), aquí sólo les pongo dos para que les sirvan de incentivo:

1. "En Alemania está naciendo un gobierno nacionalista con base socialista" Stalin
2. "En Rusia se ha formado una especie de fascismo eslavo" Benito Mussolinni.

el PSOE defiende al Régimen Franquista

A fecha de hoy, 31/08/2010, me pregunto ¿cuándo nació el Estado del Bienestar en España? Este modelo de Estado se divide en 2 partes; 1)Estado Intervencionista, basado en una fuerte regulación de la economía y del mercado, en el cual participan todos los empresarios y trabajadores, y 2)Estado-Providencia, basado en la cobertura pública de la Educación, la Sanidad, la Vivienda, las Pensiones, apoyada en el dinero de los contribuyentes y en una política redistributiva, cuyo origen a nivel europeo será objeto de estudio en artículos posteriores.
Durante la II República, Largo Caballero, Secretario General del PSOE, intentó implantar un sistema de seguros obligatorios unificado, que alcanzase tanto a obreros industriales como a campesinos. El seguro de desempleo voluntario existía desde 1931, y la liberta de elección de los ciudadanos en España era mucho mayor. La opción del sistema de seguros obligatorio se venía planteando desde 1917, no obstante, en aquella época, esa opción ni siquiera se acabó barajando por la mayoría de los partidos políticos de la República, salvo el PSOE. En 1934, Cataluña y Andalucía sobre todo, organizaron manifestaciones en contra de esta propuesta que quitaba libertad a sus ciudadanos, apoyados en unos sindicatos, en cooperativas y en sociedades de ayuda mutua, que permitían a los trabajadores cubrir sus necesidades en caso de enfermedad, jubilación, etc, sin necesidad de recurrir al Estado, del que se solían guardar en gran medida.
Ante esta situación, uno debería de preguntarse ¿por qué razón esta época es tan alabada por el PSOE? Entonces, ¿cuando se desarrolló ese Estado del Bienestar que tanto defienden, si no fue en este momento? Aunque parezca increíble, fue en el Régimen Franquista (1939-1975), cuando realmente nació este sistema que tanto defienden los socialistas. ¿La causa? Evidente. El Fascismo de Francisco Franco era anticapitalista, proteccionista, antiliberal, y defensor de las políticas socialistas, que únicamente rechazaba casualmente por sus escasos tintes liberales, basados en el internacionalismo y la democracia, como explica Friedrich Hayek en Camino de Servidumbre.
La evolución del Estado del Bienestar lo podemos encontrar ya en 1939, cuando Franco establece un modelo económico proteccionista e intervencionista férreo, que mantuvo hasta 1959, a semejanza del modelo arancelario nacionalista que defiende John Maynard Keynes. En lo que respecta al Estado-Providencia, comenzó en 1939 con el SOVI (Seguro Obligatorio para la Vejez y la Invalidez). En 1942,se implantó el Seguro Obligatorio por Enfermedad. En 1957, España vió nacer el Ministerio de la Vivienda, que impulsó una serie de Planes de Urgencia Social, tendentes a acumular la oferta de vivienda social en las grandes ciudades. El 22 de Abril de 1958, aunque parezca increíble, aparece la primera Ley sobre Convenios Colectivos Sindicales, apoyada en la negociación colectiva entre representantes de empresas y trabajadores que se mantiene hasta la actualidad. En 1961,el Estado establece el Seguro por desempleo. En 1963 se establece el Salario Mínimo Interprofesional y se promulga la Ley de Bases de la Seguridad Social, con pretensiones universalistas. La Ley otorgaba al Estado y a las mutuas laborales la potestad de suscribir seguros de accidente de trabajo y de enfermedad profesionales, mientras que sustraía las competencias que hasta el momento tenían las compañías de seguros privadas y a los organizaciones de ayuda y las cooperativas. Se reconocía la responsabilidad pública en la financiación de los seguros sociales y se comenzó a perfilar un nuevo tipo de asistencia, cuyos rasgos institucionales son los predecesores del Estado del Bienestar. La Ley del 21/04/1966 sobre Seguridad Social crea de forma definitiva este sistema asistencial, junto con la definitiva de 1972. La cúspide del Estado del Bienestar llega en 1970 con la creación del sistema educativo público obligatorio.

Con todo esto, sugiero que cada vez que un socialista ensalce la II República como modelo a seguir, y de criticar el Régimen Franquista, le siga la corriente, porque verdaderamente, tienen buenas razones al hacerlo. Nuestra defensa de la libertad individual debería ser la que siguieron aquellos hombre y mujeres que cuando tuvieron la capacidad de decidir, eligieron mantenerse ellos mismos, sin necesidad de recurrir al Estado. Sin embargo, cuando no tenían elección, vieron como el Estado Franquista les imponía un sistema por el que tenían que pagar al Estado para su supervivencia. Para despedirme, sólo quisiera decir ¡VIVA LA REPÚBLICA!, y expresar mi deseo de que en un futuro no muy lejano desaparezca este sistema deficiente e impuesto por un régimen dictatorial, y que sin embargo, muchos, desean mantener.

¡Vaya democracia!

Así es, cada vez que pienso en España me retumba la misma exclamación en la cabeza: ¡Vaya democracia! Que incesante dolor de cabeza, que migrañas me produce pensar en mi querida España y no es para menos. En que nido de granujas, ladronzuelos desvergonzados y bufones de medio pelo se ha convertido la nación más vieja de Europa. Que tragicomedia la nuestra, trágica por los 5 millones de parados, comedia por nuestro lideres, fauna mas propia de un programa de prensa rosa que de un parlamento civilizado.
Pero mi mayor pesar no se debe a la podredumbre política sino a la impasibilidad civil, siglos lleva revindicando el hombre la libertad, el autogobierno, la justicia, en definitiva la democracia. Pagando un precio muy alto generación tras generación para ahora despreciar con indiferencia nuestras obligaciones como ciudadanos.
¿Dónde están los movimientos civiles? ¿Nos queda una pizca de civismo? No lo se, España no es Carod Rovira, Leire Pajin o Francisco Camps, España es un pueblo trabajador y sacrificado, no me creo el tópico de “uno trabajando y diez mirando”, nuestros abuelos emigraron hace poco mas de medio siglo a Europa para trabajar en los empleos que nadie quería, nuestros bisabuelos, abuelos y padres reconstruyeron un país desolado por la guerra y el cainisimo, nos dieron una democracia. Y ¿todo esto para que? Para criar una generación de NiNis -ni estudian, ni trabajan, ni tienen la intención de hacer algo con sus vidas, por poco que sea-, para sostener una casta política caciquil, para convertirnos en un protectorado de los andaluces nacionalistas catalanes y toda su tropa –Montilla por ejemplo-. No, por aquí yo no paso.

Vuelvo a repetir, ¿Dónde esta nuestra sociedad civil? Periodistas que no tengan miedo a estar fuera de la red clientelar que es el Estado español, jueces dispuestos a no amedrentarse ante grotescas amenazas de políticos sin estudios superiores, una clase media decidida a luchar contra los abusos del poder. Puede que pida demasiado.
Me viene a la cabeza movimientos como el tan sonado “Tea Party”, capaz de movilizar a millones de estadounidenses en defensa de su libertad individual. Muchos no estarán de acuerdo con los ideales del “Tea Party”, incluso con los valores que sostienen a EEUU pero lo que es innegable es que ellos nunca tendrían un Tribunal Constitucional como el nuestros, nunca tendrían un Presidente dispuesto a negar la existencia de su propia nación, nunca permitirían que un ciudadano estadounidense no aprendiese la lengua materna de su propio país.

Podría expresar la admiración que siento hacia el sistema de control democrático de las instituciones americanas, de su división y separación de poderes, de cómo estos se contrarrestan entre ellos a través de sistemas tales como los “check and balance” o el “judicial review”. Incluso algo tan simple como la honestidad de sus políticos, capaces de dimitir si se han equivocado o si existe la más minima duda sobre su honradez, se que esta cuestión escuece en Europa, en España y sobre todo entre los antiamericanos, en cuyas filas se prodigan individuos dispuestos a cualquier cosa por un sillón.

Parte de mi terapia para calmar los dolores que al principio de este textos os describía es redactar estas líneas, sin animo de que ellas algo cambien, pero con la esperanza de que una vez mas los españoles nos sorprendamos gratamente de nosotros mismos y al mundo entero, por nuestra capacidad de superar situaciones nefastas.

J.C.

La cumbre del G-20

Tras un largo periodo de crisis económica, los países afrontan hoy esta cumbre con la intención de tratar dos temas en especial. Uno el de la regulación financiera y otro el de las políticas económicas.
Obama llega a Toronto con energías renovadas tras conseguir la aprobación de su reforma financiera, en la cual, los grandes bancos universales se ven intensamente intervenidos, a pesar de que en Europa suponen la espina dorsal de la economía.
La principal idea con la que quiere iniciar su intervención Obama, es la de animar a los países europeos a que aumenten el gasto público. Pero ahora bien esto en nuestro caso no puede ser posible, porque las arcas del estado están empezando a decir basta. De este modo espero que nos demos cuenta que el dinero público no es la gran cartera de papa, de la que echar mano cuando las cosas no te van bien.
Por otra parte tenemos al nuevo primer ministro británico David Cameron que todavia no sufre el desgaste de la crisis dado que fue elegido hace poco aun asi llegan noticias sobre sus modificaciones más inmediatas. Por ejemplo, en Renio Unido se aprobó el miércoles pasado un impuesto a los bancos que en principio emplearían para pagar los futuros rescates.
La canciller alemana Ángela Merkel llega con intención de defender su plan de austeridad y solidez económica, solidez que aun no tenemos muy claro que posean sus bancos, cuyos resultados de los`` test de estrés´´ no quisieron hacer públicos. Sabemos los de EEUU, y España se está preparando para iniciarlos.
Paradójicamente al otro lado del ring tenemos a Canadá y a Australia, como países industrializados, y a Brasil y Sudáfrica, como economías emergentes mas aventajadas. Estos defienden que, dado que no han sufrido crisis bancarias porque deberían adaptarse a las medidas propuestas, menuda lección de humildad y compañerismo nos están dando.
Me gustaría incluir en mi artículo un apunte sobre esta cumbre porque echo en falta algo muy importante, ¿donde está una modificación en la estructura del mercado? ¿Qué hacemos si en unos años volvemos a entrar en crisis con el mismo sistema que nos llevo a la anterior?, o lo que es peor ¿Qué pasará si en medio de tanto anuncio de reforma por aquí y reforma por allá, nos explota otra crisis en la cara? Esto puede pasar, que sepamos aun no se tiene constancia de cómo reaccionarán los mercados cuando se publiquen los resultados de los test de estrés, porque no inspirarán confianza alguna en caso de que sean negativos.
La cuestión más importante es que un mercado excesivamente regulado o regulado a medias es igualmente peligroso, porque nos lleva a situaciones como esta.
El libre mercado del que nos hablaban los economistas clásicos y los posteriores escritores liberales, es una opción en mi opinión muy acertada, y sin embargo muy criticada.
Me hace mucha gracia escuchar que fue el libre mercado el que nos llevo a esta crisis, que fue el liberalismo el motivo de todos nuestros males cuando realmente en ningún país del mundo se ha llevado a cabo una política realmente liberal. El liberalismo no da pie a monopolios, como tampoco da pie a políticas de brutal gasto público, ni a la fijación de los precios, ni a ingentes inyecciones de capital que no hacen sino falsear la economía, porque eso nos lleva a una depreciación de las divisas y aunque durante cierto tiempo los mercados ``funcionen´´ seguiremos en las mismas y volveremos a caer.
Supongo que es como una pescadilla que se muerde la cola, pero a este paso dejaremos de tener pez en breve.

I.C.

La Constitución Colectivista: La Reforma Laboral

Hace poco Libertad Digital entrevistó a Cristóbal Montoro, portavoz económico del PP, con el fin de preguntarle personalmente cuál sería la alternativa de su partido a la Reforma Laboral que ha presentado el PSOE, y que va a entrar en vigor en julio de 2010.
Lo más curioso de sus comentarios fueron la necesidad de suprimir el convenio colectivo de trabajo, o convenio de negociación colectiva, a fin de desregular el mercado de trabajo. De esta manera, se pretende que cada empresa ofrezca los salarios que considere adecuados, de acuerdo con el mercado, en el que cada empresario observe qué sueldo ofrece una empresa a un trabajador para intentar mejorarlo, y así hacerse con el empleado. Así, el trabajador escogería el empleo más adecuado, dada su formación, aptitudes y preferencias.
Aunque ésto parezca un tanto utópico para el que lo esté leyendo en un primer momento, debería de reflexionar y observar cómo no es tan extraño, porque es lo que sucede en estos momentos en España con la numerosa economía sumergida, que es la que todavía mantiene en vilo al país e impide que nazca una huelga o unas manifestaciones de dimensiones titánicas contra el Gobierno actual, debido a su ineptitud y desconocimiento del mercado. Ahora, una empresa ofrece empleos en base a lo que ofrecen otras empresas (naturalmente, a escondidas de la reglamentación general de los convenios colectivos), pero al ser pocas las ofertas, los empresarios que se mantienen no dan muy buenas oportunidades a los trabajadores. El problema auténtico no está en los empresarios, sino en la falta de empresarios. No hay que atacar la figura del empresario como causante de la crisis, sino favorecer la aparición de un clima económico en el que se den facilidades a los ciudadanos para crear nuevas empresas, y que ofrezcan mejores oportunidades a los trabajadores, frente a las explotadoras de algunos empresarios actuales.
A pesar de que sería conveniente realizar este proyecto para incentivar al mercado, y con ello a los ciudadanos, además de asegurar la libre competencia, la triste realidad es que resulta inaplicable. La razón de ésto es que esta propuesta es inconstitucional, ya que infringe el art. 37.1., de nuestra Constitución de 1978, que de nuevo favorece al pensamiento socialista y da la espalda al liberal.
Como dice textualmente: "La ley garantizará el derecho a la negociación colectiva laboral entre los representantes de los trabajadores y empresarios, así como la fuerza vinculante de los convenios". De esta manera, lo único que se ha conseguido es crear unos contratos normativos, en los que las grandes empresas (actuando como lobbies que apoyan medidas beneficiosas para ellas exclusivamente), actuando como representantes de las empresas, y los sindicatos, haciendo el papel de representantes de los trabajadores, fijan una serie de reglas a las que las pequeñas y medianas empresas, y todos los trabajadores, incluidos los no afiliados a sindicatos (89-90% de la población activa en España), tienen que adaptarse, aunque les perjudique.
Lo que parece increíble es que a estas alturas, todavía se crea que un grupo de empresarios pueden representar todos los intereses de todos los empresarios, cuando son un grupo completamente heterogéneo, con preferencias completamente opuestas en numerosas ocasiones, ya que siempre están en completo enfrentamiento, intentando ofrecer mejores oportunidades para llevarse al cliente. A su vez, lo que resulta aún más imposible de creer es que todavía se piense que los sindicatos son los representantes de todos los trabajadores, unos gremios que representan con sus afiliados, a apenas el 10-11% de la población activa en España (CC.OO y UGT con 2.100.000 afiliados, frente a los 18.400.000 trabajadores que hay ahora mismo en España, en época de crisis, con casi 5.000.000 de parados). Si ya los empresarios son un grupo con multitud de intereses, no hace falta decir hasta qué punto existen diferencias en las preferencias de los trabajadores. Los empresarios nunca van a tener intereses únicos ni mucho menos, y los trabajadores jamás tendrán intereses en común (no creo que los intereses de un agricultor sean los mismos que un vendedor de lavadoras, a menos que pretenda plantar la ropa lavada).
Sostener todavía el canon marxista de los intereses enfrentados de empresarios y trabajadores, cada uno como grupo homogéneo, como si un trabajador fuese siempre un trabajador, y un empresario siempre un empresario, es patético en la gente, pero lo es aún más cuando aparece recogido en la ley fundamental que regula todas nuestras leyes (la Constitución). En numerosas ocasiones, los intereses de un empresario y de un trabajador de un sector económico concreto tienen mucha más relación que las de dos trabajadores pertenecientes a sectores económicos distintos.
Ya va siendo hora de que España se adapte a la globalización y a la nueva sociedad de mercado que nos va a tocar vivir, y que es el reto del siglo XXI. Ya va siendo el momento en el que se abandonen los estereotipos socialistas propios de etapas pasadas, y abandonados incluso por algunos de sus antiguos defensores
Por ello, la solución que pedimos para este problema es la derogación del artículo 37.1. de la Constitución de 1978, para que la reforma laboral propuesta pueda llevarse a cabo, y se abandonen definitivamente, o al menos se reduzcan, las negociaciones colectivas, avaladas por el Estado y su pequeño grupo oligárquico de privilegiados, que con sus reglas laborales imponen normas a las nuevas generaciones de empresarios, más cercanas a la nueva sociedad de lo que lo estará nunca cualquier burócrata, para así adaptarse a los nuevos intereses de los individuos y garantizar el bienestar general de la sociedad española.
L.T.

La Constitución Colectivista: El Caso Rumasa

No resulta necesario explicar el caso Rumasa. Todo el mundo recuerda el día (23/02/1983), en el que Felipe González, mediante el Decreto-Ley 2/1983, se aseguró de que el Estado confiscara todos los bienes de esta empresa (por valor de 2.000 millones de euros actuales), conocida por los vínculos que mantuvo con el franquismo durante la dictadura (1939-1975), .
Hubo una gran polémica respecto de la legalidad de esta acción, que algunos la relacionaron con la URSS, por la semejanza que dejaba entrever en lo que se refería a sus métodos, y su total falta de respeto hacia el derecho de la propiedad privada.
Naturalmente, la relación con la URSS resulta extrema, pero no tanto sobre la violación de la propiedad privada. Muchos pensaron, "¿cómo ha podido suceder? Bien es cierto que José María Ruiz Mateos, dueño de la empresa, había mantenido relaciones políticas y económicas con Franco, y que este último fue un dictador y un asesino sin escrúpulos, pero aunque ésto fuera cierto, existen límites que, sin lugar a dudas se han agredido. El Estado no puede actuar así libremente, es imposible que la ley lo permita".
Si la ley lo prohibe, ¿cómo ocurrió?, ¿acaso es que hay alguna ley desconocida que lo consienta?, ¿de verdad está vigente alguna norma legal que diera permiso a Felipe González para acometer semejante acto? Pues bien, la respuesta es sí, y no es una simple ley fácilmente derogable, sino 2 artículos de nuestra actual Constitución de 1978 en los que se apoyó el susodicho ex-presidente para justificar sus acciones, y con razón, ya que lo toleran claramente, si se tienen suficientes medios, y Felipe González los tenía.
Éstos artículos son el 33.3. y el 106.2., pero no los acusemos tan severamente y dejemos que sean ellos mismos los que hablen para que vean el grado de preocupación que causan. El artículo 33.3. dice: "Nadie podrá ser privado de sus bienes sino por causa justificada de utilidad pública o interés social, mediante la correspondiente indemnización y de conformidad con lo dispuesto por las leyes", y complementando a éste, el 106.2. dice: "Los particulares, en los términos establecidos por la ley, tendrán derecho a ser indemnizados por toda lesión que sufran en cualquiera de sus bienes y derechos, salvo en los casos de fuerza mayor, siempre que la lesión sea consecuencia del funcionamiento de sus servicios públicos".
En base a esto, Felipe González argumentó en el juicio que, confiscó y nacionalizó esa empresa en aras de la utilidad pública y del interés social (que no puede ser otra cosa que su libre arbitrio), y que la indemnización no se debía de conceder por causas de fuerza mayor.
Sin lugar a dudas, una maravillosa interpretación de la Constitución, cuyo mérito está en saber ver que mediante buenos argumentos y haciendo uso de estos dos artículos de la ley suprema de nuestro ordenamiento jurídico, era posible violar la propiedad privada.
La única solución que veo, a título personal, es que se derogen o se reescriban estos artículos para impedir que las excepciones que presentan puedan servir para que el Presidente del Gobierno, o el ministro de turno, tengan potestad para agredir uno de los derechos básicos de toda sociedad democrática moderna y del ser humano, que existe desde la más temprana edad del hombre y todavía no tiene una seguridad plena y garantizada en nuestras leyes, como se ha podido comprobar en las presentes líneas. De este modo, esperamos asegurar la libertad de los ciudadanos frente a las decisiones y el libre arbitrio de nuestros gobernantes y de los poderes públicos.
Muy atentamente,
L.T.